Me gustó la manzana nueva que probé con Richard y Patrice, tiene una carne blanca de color algodón y textura de ciruela, su piel es fina y el hueso grande y redondo como el del melocotón pero sin geometría, parece una piedra. También me gustó el Ackee, fruto rojo de arbol grande que se cocina con pescado. El ackee es muy suyo, no admite bromas, se abre solito en el árbol para ofrecer sus tres gajos con sus tres semillas, es exquisito para los pacientes pero fruto venenoso para todo aquel que intente acortar su ciclo , entre letal y alucinógeno. Muy contenta iba cogiendo semillas y vainas de estas y otras plantas para naturalizarlas, -¡Tentador pecado autóctono!- en Mallorca, y pregunté a Richard, ¿Tú crees que se darán én España?, si, claro, claro, no son delicadas ni necesitan cuidado. Al rato volvió preocupado y sin introducción me espetó la pregunta trágica : ¿Do you have winter?, de repente me sentí muy lejana, dama del frío, reina de Narnia, SI, respondí avergonzada y con un jersey en la voz . No tuvo que decirme nada , me fui botanicamente derrotada pero guardo las semillas, si el cambio climático nos quita el invierno, me pillará preparada.