Somos Robinsones mediopensionistas y construimos nuestra cabaña en Son Real, junto a la necrópolis de los reyes antiguos.
Instalación efímera, troncos blanqueados como huesos en el desierto, ramas de cristal y viento.
Mediterraneo casi homérico, lapas, caracoles, un erizo muerto.
Las algas se me hacen sargazos en el tobillo, simas las pozas, y arrecifes las rocas, tan ásperas, que esquivo.
Coge tu sombrero y póntelo, vamos a la playa calienta el sol, siempre escribo tu nombre en la arena pero no leo más líneas que las del mar.